"El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices." (Oscar Wilde)

martes, 2 de septiembre de 2014

Síntesis capítulo 6






BIBLIOGRAFÍA

  • De La Torre  M. Cómo actuar frente a un accidente infantil. Madrid: Sociedad Española de Urgencias de Pediatría; 2010.
  • Escuela Andaluza de Salud Pública. Accidentes infantiles. Tipología, causas y recomendaciones para la prevención. Granada: Junta de Andalucía; 2008.
  • Gaitán M. coordinador. La infancia en cifras 2009. Madrid: Ministerio de Sanidad y Política social, Universidad Complutense; 2011.
  • Miranda MA, Falcón M. Seguridad en centros infantiles de 0 a 3 años. Madrid: AENOR; 2012.
  • Palomar M, Muñoz L, Nus P y Arteaga L. Autonomía personal y salud infantil. Barcelona: Altamar; 2008

Valoración del papel del educador o educadora, en la prevención de riesgos relacionados con la salud y la seguridad infantiles



Por último, el educador o educadora infantil juega un papel fundamental a la hora de poner en marcha las medidas preventivas necesarias para preservar la salud y evitar accidentes en la etapa infantil, como ya hemos visto a lo largo de todo el libro. De este modo, deberán conocer los riesgos potenciales de accidentes, la sintomatología propia de las enfermedades infantiles y los protocolos de actuación, además de  saber situarse en la realidad social del medio familiar de los niños y niñas que tiene a su cargo.

En términos generales las educadoras y educadores infantiles, como agentes de salud, deberán:

  • Proteger el entorno que rodea al niño o niña.
  • Seguir rigurosamente los protocolos de actuación en cuanto a la seguridad e higiene.
  • Educar en hábitos saludables.
  • Enseñar niñas y niños a desplazarse, bajar y subir por los lugares adecuados y de forma correcta.
  • Fomentar y reforzar los comportamientos conducentes a la evitación de riesgos para la salud.
  • Mantener un aseo y arreglo personal que garantice su higiene y sirva de modelo.
  • Formarse en todo lo que tiene que ver con la higiene y seguridad en centros infantiles (manipulación de alimentos, prevención de riesgos, primeros auxilios, etc.).
  • Estar vigilantes durante las actividades de niños y niñas (especialmente en actividades de mayor riesgo como jugar en los columpios, revisar que no haya objetos pequeños que se puedan llevar a la boca, etc.).
  • Colaborar con las familias y asesorarlas si es preciso en cuanto a la seguridad e higiene de los/as pequeños/as.

Análisis de estrategias e instrumentos para valorar las condiciones de seguridad e higiene de los centros educativos y de atención a la infancia



En los centros infantiles la seguridad e higiene deben ser elementos centrales de su gestión, por lo que se han de poner en funcionamiento una serie de estrategias y estándares que eliminen o minimicen los riesgos, las cuales cuenten con el compromiso de toda la plantilla de centro.

Por otro lado, además del empeño en controlar del entorno y enseñar hábitos saludables, los centros infantiles deben contar con un plan de mantenimiento, que posibilite que todo esté en perfecto estado en función de la eliminación de riesgo, y con un sistema de evaluación interno y externo, a través de auditorías, que garantice la seguridad e higiene a todos los niveles.

Resulta conveniente que las escuelas infantiles implanten un sistema de calidad, que asegure el cumplimiento de unos estándares. En este sentido, en 2011 se aprobó la norma UNE 172402:201, que define los requisitos técnicos de seguridad y de prestación del servicio que debe cumplir una escuela infantil, ya sea pública o privada, para garantizar un servicio de calidad.

El sistema de gestión de la calidad bajo la norma UNE 172402 debe contemplar todos los procesos del centro infantil y contar con el compromiso de todo el personal. Los requisitos y especificaciones se harán sobre aspectos clave como:

  • Ubicación. 
  • Instalaciones comunes y específicas.
  • Equipamientos.
  • Higiene y seguridad de los equipamientos e instalaciones.
  • Plan de emergencias.
  • Gestión de la calidad del servicio, en el ámbito educativo y asistencial.
  • Recursos humanos.
  • Organización interna y administrativa.

Por otro lado, la escuela infantil deberá aplicar sistemas basados en los principios del Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico (APPCC) según la normativa vigente. Como ya se explicó en el capítulo de La alimentación infantil, un sistema APPCC es un sistema preventivo cuyo fin es garantizar la calidad higiénico-sanitaria final de los productos alimenticios. Se basa en el análisis de las causas que pueden llevar a un alimento a ser inseguro para el consumo humano, es decir, qué peligros sanitarios (biológicos, físicos y/o químicos) puede haber en el consumo habitual de los alimentos.

Un APPCC analiza riesgos y peligros en todas las etapas que se siguen en la elaboración de un alimento para identificar dichos peligros y describir las medidas preventivas. En la escuela infantil la comida puede ser in situ o transportada y en ambos casos se debe marcar los límites a partir de los cuales los productos son seguros o inseguros.

En el siguiente punto veremos el establecimiento y vigilancia de los puntos de control crítico en cuanto a la seguridad alimentaria.

Peligros y puntos de control críticos

El primer paso para realizar correctamente el análisis de peligros en la escuela es identificar los peligros alimentarios que pueden tener lugar en la elaboración o recepción de comidas, que pueden ser de origen biológico (bacterias, virus y parásitos), de origen químico (pesticidas, aditivos, etc.) o de origen físico (vidrio, huesos, etc.).

Después de listar todos los peligros que son razonablemente posibles en cada etapa de preparación de las comidas, se debe valorar la importancia de cada uno de ellos, teniendo en cuenta la probabilidad de ocurrencia y gravedad de las consecuencias en el consumidor, y considerar qué medidas de control se van a aplicar para cada peligro, estableciendo los puntos de control críticos (PPC).

Un punto de control crítico hace referencia a la fase en la que puede aplicarse un control y que es esencial para prevenir o eliminar un peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos o para reducirlo a un nivel aceptable.

Ejemplo puntos de control críticos en una escuela infantil
Punto de control
Recepción de comida elaborada
·         La escuela dispondrá de una zona para la recepción de los termos en los que se suministra la comida elaborada, fruta, productos lácteos, pan.
·         Esta operación se realizará siempre de manera que se evite toda contaminación del producto con otros alimentos, superficies o equipos.
·         Se realizará un control de los alimentos en el mismo momento de su recepción, para poder rechazar aquellos que no son correctos. Los controles serán los siguientes:
o   Para los productos refrigerados se controlará la temperatura en el momento de la recepción.
o   Para los productos en caliente se controlará la temperatura en el momento de la apertura de los termos.
o   Para todos los productos alimenticios, se deberán realizar controles visuales y organolépticos los productos (color, olor, aspecto y textura).
Peligros existentes
·         Multiplicación microbiana debido a que el alimento no se ha mantenido a una temperatura superior a 65 °C.
·         Multiplicación microbiana debido a que el alimento no se ha mantenido a una temperatura inferior a 8 °C.
·         Contaminación del alimento a través de los manipuladores o de superficies sucias (contaminación cruzada).
·         Adquisición de género dañado o golpeado (ej.: frutas).
Prevención
·         Introducir las materias primas y el menú en frío en las cámaras de refrigeración en el momento de su recepción.
·         Aplicar buenas prácticas de manipulación
·         Mantener el lugar de recepción en unas condiciones adecuadas de Limpieza y Desinfección
·         Evitar cruces de productos (alimentos y basuras por ejemplo).
·         Desechar producto dañado.
Control y registro
·         Anotar irregularidades

Seguridad en los centros infantiles



La seguridad en los centros infantiles, como ya hemos visto anteriormente, se basa en la protección del medio, con el fin de lograr la mayor seguridad en el entorno, y en la educación del alumnado, con el objetivo de lograr la mayor autonomía y adquirir hábitos saludables.

Evidentemente, la protección del medio debe contemplar el cumplimiento estricto de la normativa de seguridad vigente, cuyas referencias aparecen en el siguiente cuadro.

Normativa de seguridad en centros atención a la infancia
·         R.D. 113/2004 de 23 de enero (BOE de 6 de Febrero 2004), del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que establece los aspectos educativos básicos de la Educación Preescolar, y determina las condiciones que habrán de reunir los centros de esta etapa.
·         R.D. 2207/1995 de 28 diciembre sobre normas de higiene relativas a los productos alimenticios: Código de Buenas Prácticas Higiénicas.
·         R.D. 3484/2000 de 29 diciembre por el que se establecen las normas de higiene para la elaboración, distribución y comercio de comidas preparadas y la obligatoriedad del autocontrol mediante el sistema de Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico (APPCC).
·         Ley 31/1995, de 8 de noviembre, Ley de Prevención de Riesgos Laborales y sus modificaciones.
·         R. D. 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las Disposiciones mínimas de Seguridad y Salud en los Lugares de Trabajo.
Normativas autonómicas relacionadas con la regulación de los centros de menores y los centros de atención a la infancia.


Prevención de accidentes en la escuela infantil
Las escuelas infantiles deben adoptar medidas preventivas para evitar accidentes. Muchas de las medidas preventivas que hemos visto anteriormente en relación al hogar también son válidas para los centros infantiles. Por lo tanto, en este punto pasaremos a enumerar medidas específicas en relación a la seguridad en la escuela. Algunas de estas medidas son:
  • Crear una zona de seguridad infantil en la cual no exista ningún elemento peligroso o de riesgo accesible a niños y niñas que pueda causar daños físico o psíquico. Normalmente este espacio estará comprendido entre el suelo y una altura de 1,40 metros.
  • Cuidar que siempre haya una buena iluminación, sobre todo en las zonas de trabajo y de paso.
  •  Existencia de vallas protectoras alrededor del patio.
  • Las barandillas serán altas, con una separación entre barrotes de 10 centímetros máximo.
  • Los materiales y juguetes serán inocuos, homologados y fácilmente lavables.
http://www.msssi.gob.es/va///profesionales/saludPublica/prevPromocion/Lesiones/docs/GuiaSeguridad_ProductosInfantiles.pdf (Guía de Seguridad de los Productos Infantiles: Productos potencialmente peligrosos.)
  • No permitir la entrada de objetos del exterior, ya que pueden no estar homologados y causar algún riesgo.
  •  Evitar piezas pequeñas al alcance de niños y niñas.
  • Los suelos serán ligeramente blandos, con cierta capacidad de amortiguación (Suelo de caucho bajo los columpios, por ejemplo)
  • Las paredes y columnas estarán protegidas, minimizando las consecuencias de golpes y/ caídas.
  • ·         Las puertas y ventanas deben evitar la accesibilidad a la manipulación de niños y niñas, evitando así lesiones por atrapamiento de extremidades, golpes, etc.
  • A su vez, las puertas tendrán un sistema de seguridad que impida quedarse encerrado.
  • Evitar equipamiento o mobiliario que facilite la escalda, ya que en caso contrario se puede acceder a zonas de riesgo.
  • Todos los desniveles deben ser salvables para los niños y niñas en los espacios donde realicen sus actividades.
  • Los enchufes estarán situados a la altura adecuada y protegidos. También estarán a la altura adecuada todos los dispositivos electrónicos y su cableado.
  •  Las luminarias estarán protegidas.
  • Todas las instalaciones destinadas a la higiene y actividades infantiles serán totalmente accesibles visualmente.
  • Control de accesos al centro, tanto de salida como de entrada, protegiendo a niños y niñas de extraños, escapes o accidentes.
  • Vigilar que los extintores estén en buen estado y en lugares visibles y conocidos por el personal del centro.
  • Los radiadores estarán protegidos.
  •  Botiquín bien dotado y con mantenimiento constante, evidentemente fuera del alcance de niñas y niños.
  • Obligatoriedad de un plan de seguridad de evacuación o emergencia (Plan de Autoprotección), realizando periódicamente simulacros de evacuación.
  • Los patios deben tener zonas separadas para juegos rápidos y lentos.
  • Todos los columpios deben cumplir las directrices de seguridad